Se puede argumentar sin problemas que todos los debates que se abordan en la Bienal de Pensamiento afectan de manera especial a las generaciones jóvenes. Hablamos, al fin y al cabo, de los ciudadanos y ciudadanas que tendrán que vivir en este mundo hacia el que nos dirigimos. Esta franja de público, además, es consciente de ello y responde conformando una de las tipologías de asistentes más mayoritarias. Una programación de acceso libre y gratuito, inclusiva, y con temáticas que irradian presente, pero sobre todo se proyectan hacia el futuro, parecen las claves del éxito. Pero además hay un esfuerzo por diseñar algunas de las sesiones para que les interpele directamente.

Este año sobresale especialmente BIVAC, un nuevo proyecto que lidera el CCCB y la productora cultural La Sullivan con la colaboración de dieciséis jóvenes de la ciudad. Concebido como un pequeño festival dentro de la Bienal, realizado por jóvenes y para jóvenes, BIVAC se concreta en cuatro acciones o eventos: tres de ellas la tarde del día 13 y una en forma de instalación vigente durante toda la semana llamada Campamento. En Encuentros a la intemperie, cinco parejas de jóvenes creadoras, pensadoras y activistas dialogarán en torno a la idea de refugio, un bálsamo necesario en un mundo y un presente que demasiado a menudo se presenta hostil. Correspondencias incide en el mismo marco pero se ha articulado como un diálogo entre la escritora Aixa de la Cruz y la cineasta Clara Roquet. Celebración de un final, ya entrada la noche, hará honor a su nombre y propone un colofón festivo con palabra, música y baile.

A algunas franjas de edad el término metaverso quizá les resulte ajeno, pero no a los que rondan la veintena y la treintena. De su potencialidad como entornos alternativos a la realidad analógica hablarán algunos expertos en Metaversos deseables, realidades virtuales donde queramos vivir. Distopía es otro concepto que se ha popularizado en los últimos años, a pesar de no ser nada nuevo. Y desgraciadamente a menudo para describir el presente. Y es que, sobre todo para millennials y zoomers, el mundo parece tambalearse de una manera que no se aviene con buena parte de los imaginarios optimistas heredados de generaciones anteriores. Utopía y distopía, el domingo 16, describe este pensamiento pendular a lo que parecemos abocados, del “otro mundo es posible” al nihilismo y viceversa, varias veces al día.

Ciudad e identidad, también la última jornada de Bienal, nos acercará a los vínculos que establecemos con el entorno urbano en el que desplegamos nuestra existencia, y lo hará a través de las construcciones y apropiaciones que hace el audiovisual, probablemente el lenguaje que más conecta con el imaginario joven.
A continuación, tendremos la oportunidad de despedir esta edición con dos sesiones que rehúyen el formato habitual. Podremos optar por el humor, tirando a roto, de +Riurem, con iconos radiofónicos y televisivos como Marc Sarrats o Elisenda Pineda; o por una edición especial en directo de Gent de Merda, uno de los podcasts millennial más exitosos de nuestro ecosistema postradiofónico.